miércoles, 16 de octubre de 2013

Winston Churchill James Jordan: OPUS POR SI DIOS EXISTE o la manera como me volví a enamorar de un poema.


Dijo Luis Wong Vega,  en el año 2000,  que "La poesía existencial de Winston es menos conocida pero, sin embargo, es quizás la que le permite elevarse a alturas mayores del pensamiento y del sentimiento. Sus poemas conjugan estaciones de dolor personal y momentos trágicos en el texto, con elementos de una perspectiva "épico-elegíaca" no muy  frecuente en Panamá: un tono declamatorio muy acentuado, una visión filosófica insondable, la síntesis de ideas y fuertes sentimientos dentro de poemas que tocan los grandes temas del hombre: la vida, la muerte, la transcendencia, el dolor, el amor, en fin. Igualmente, es evidente la adscripción del autor a las posiciones filosóficas del existencialismo y del humanismo. Winston, en algún momento, hace esto totalmente manifiesto al declarar que el filósofo francés Jean Paul Sartre "es su verdadero padre".

Anoche  tuve el placer de escuchar la lectura del poema OPUS POR SI DIOS EXISTE en la voz de su autor y volví a sentir las mariposas en el estómago y las candelillas picándome por todos lados,  en fin,  toda esa  fauna imaginaria,  que se apoderan de mi ser,  cuando mi cerebro dice BINGO y el alma se me encoje como un pañuelito achurrado por la emoción de encontrar un verso,  mejor dicho,  "él" verso que llega (cae) al alma,   parafraseando al vate chileno:  "como al pasto el rocío".

Los expertos han de estar de acuerdo en que llegado a un punto de la vida terrenal (o existencial) de un verso, éste deja de ser propiedad del autor y pasa a ser patrimonio intrínseco de los que los devoramos,  lloramos, sentimos y hacemos simbiosis con su texto.  Por eso "Opus por si Dios existe" del abogado,  activista y poeta panameño Winston Churchill James Jordan,  oriundo de la provincia de Colón, es mío;  igual o tan mío como lo es también el poema "Invictus" de William Ernest Henley o "Itaca" de Cavafis.

Y como quiera que es mío,  como el sol,  el aire,  la libertad,   la lluvia,  el cielo,  las rosas,  el amor y la alegría por eso quise compartirlo con ustedes:


OPUS POR SI DIOS EXISTE

Dios
a veces mío,
otras de los ateos.
No sé si existes,
en ocasiones he llegado a creer en tí.
Sin religión,
sin credos,
solamente con el alma,
nuestro único altar,
lugar donde he derramado un maremagnum de lágrimas,
por todos los pecados del hombre
y su tremenda miseria humana.

Dios
no creo que sea importante saber que existes,
esa inquietud hay que desecharla
arrojarla a un inhóspito acantilado
para que los buitres la degusten,
pero hay que iniciar el periplo hacia el gólgota
cargar con nuestra cruz
sin gemidos
hacer que nos crucifiquen
una y otra vez
un montón de veces
multiplicar nuestros panes y nuestros peces
dejar que los niños vengan a nosotros,
esos niños que nacieron para ser felices
y que no sueñan
porque la realidad es interminable
y fría como la nieve.

Dios
A veces he intentado encontrarte
frente al espejo marino.
Te he buscado en el coqueteo del alba
y  en esas noches en que el cielo repleto de estrellas me ha inundado
y me ha desbordado
hasta derrumbarme en éxtasis.

Dios
algún día llegarás
creo firmemente que nos encontraremos
frente a frente
antes del infierno
antes del paraíso
y entonces te voy a mirar fijamente,
sin cortapisas
sin miedo
sin nada innecesario
y te exigiré un duelo
sin armas.
Solamente preguntas circunspectas
las cuales espero que respondas sin titubeos,
sin escapatorias,
con lenguaje parco
totalmente alejado de laTorre de Babel.

Dios,
a veces mío
otras  de los ateos
olvida a Judas y sus treinta monedas de confeti.
Quiero que abandones la cruz,
Deja de sangrar.
Inicia tú retiro del Gólgota cruel,
Perdónalos AUNQUE SÍ SABÍAN LO QUE HACÍAN,
acércate a mi,
enjuaga mis lágrimas,
acompaña a este hombre de búsquedas,
enséñale a encontrar el amor,
dame de beber en esa fuente de agua viva
champaña metafísica.

Perdona mis inmensos pecados,
Acaríciame como a un niño huérfano.

Y en una bandada de palomas y gaviotas
con una orquesta de ángeles
llévame
a vuelo de pájaro
HASTA TÚ CORAZÓN.